Tag Archives: LIBROS PARA MUSICOS

POR QUÉ NOS GUSTA LA MÚSICA, POR SILVIA BENCIVELLI

Allá por el 2012, en una clase de pedagogía de la música en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, un profesor, del que conservo un grato recuerdo, nos transmitió un mensaje muy claro y contundente que, en líneas generales, decía: “si queremos enseñar música, tenemos que hacer todo lo posible por entender el porqué a la gente le gusta“. Obviamente, no solo es absolutamente cierto, sino que también es imprescindible conocer los beneficios y porqués reales (científicos) que la música brinda y trae consigo, y más allá de las percepciones y los miles de artículos pseudocientíficos que recorren la red.

[MÁS ALLÁ DEL MARKETING DE LA EDUCACIÓN MUSICAL]

 

SOBRE LA AUTORA Y SU MOTIVACIÓN POR ESCRIBIR ESTE LIBRO

Silvia Bencivelli

La italiana Silvia Bencivelli tiene formación en medicina, cirugía y en comunicación. Actualmente, compagina su actividad independiente como periodista y divulgadora científica con la docencia en la Universidad de Roma. Ha sido galardonada en múltiples ocasiones por sus trabajos científicos y periodísticos de prensa, radio y televisión.

A raíz de la historia de un artículo sobre por qué nos gusta la música de los Beatles, Silvia se vio motivada a redactar este libro en el que pretende, a grandes rasgos, mostrar una recopilación de estudios científicos que intentan explicar la compleja relación entre el hombre y la música desde una perspectiva íntegramente transversal.

 

 

CONTENIDO Y ESTRUCTURA

Por qué nos gusta la música es un libro, como se denominaría desde el punto de vista de las humanidades, puramente holístico, ya que intenta dar respuesta y aborda esta cuestión desde diversas disciplinas del conocimiento como, nombrando algunos ejemplos:

Antropología (y sus diversas ramas): el papel que jugó la expresión musical desde el punto de vista evolutivo de nuestros antepasados, la música como protolengua universal, diferencias entre las capacidades musicales del ser humano y las de otras especies animales, etcétera.

Neurología: dada su complejidad y todo lo que hace funcionar a nuestro cerebro, pone en valor la música como una gran aliada para entender el funcionamiento neurológico humano. También habla del cerebro musical, su actividad y desarrollo, así como de las predisposiciones naturales para ejercer ciertas actividades (talento).

Pedagogía: tanto de la misma pedagogía de la música como de ésta como una poderosa herramienta metodológica para transmitir todo tipo de conocimiento y habilidades.

Sociología: cómo y por qué influyen nuestros gustos y capacidades musicales en la manera de relacionarnos con otras personas desde la antigüedad hasta nuestros días.

Física y fisiología del sonido: funcionamiento del sonido, las ondas, así cómo nuestro cuerpo las interpreta y qué distintas sensaciones produce en él.

Psicología: origen y desarrollo de los gustos musicales de cada individuo, el complejo mundo de las emociones y su inseparable relación con la música, la música como terapia desde la propia gestación hasta la vejez (musicoterapia).

Historia: personajes y acontecimientos históricos relevantes; muy valiosos desde el punto de vista de la cultura musical general.

Filosofía: importancia y anécdotas de la música dentro de la obra e inquietudes de grandes pensadores de la humanidad. La música desde el pensamiento filosófico antiguo hasta la ciencia moderna.

Dicho libro, estructurado en 10 capítulos que no se corresponden con anterior propuesta por ramas académicas, va saltando de científico en científico y de estudio en estudio de una forma puramente transversal y a lo largo del tiempo, mostrando la abrumadora complejidad de la música y todo lo que ésta tiene que demostrar sobre el funcionamiento de nuestro cerebro y nuestro proceso evolutivo y de adaptación al medio.

 

¿A QUIÉN VA DIRIGIDO ESTE LIBRO?

Portada del libro

A pesar de ser un libro sobre música y ciencia, no es necesario ni ser músico ni ser científico para poder disfrutarlo y aprender de él, ya que no abusa (para nada) de tecnicismos. El lenguaje empleado es bastante entendible y su lectura muy amena. No obstante, sí es cierto que, si se tiene alguna experiencia relacionada con la música o una alta sensibilidad hacia ésta, se podrá empatizar con mayor profundidad algunos de los conceptos y experiencias que en él se hacen referencia.

Por ello, esta obra puede ser consumida con aprovechamiento por cualquier tipo de lector inquieto que esté interesado en saber más sobre cómo música y ciencia se miran y sonríen mutuamente. A mí, personalmente, me ha amueblado bastante la cabeza y me ha dotado de muchas herramientas culturales y didácticas para mi quehacer diario.

 

 

CONCLUSIONES PERSONALES

En mi caso, este libro lo he leído en dos ocasiones: una primera vez, en 2012, cuando empecé a interesarme por el fenómeno musical más allá de tocar muy bien mi instrumento y gracias a la recomendación expresa de un profesor, y una segunda vez, recientemente, enfocando su lectura hacia la elaboración del presente artículo/vídeo.

Al releerlo, me he dado cuenta de:

-Muchos de las anécdotas, información y datos que suelo usar, tanto en mis clases como en las conversaciones musicales que surgen espontáneamente, los he sacado de este libro, y no lo recordaba.

-Me he vuelto a sentir tremendamente orgulloso de haber decidido dedicar mi vida académica, profesional y, prácticamente, personal a la música, entendiendo ésta como una profesión multidisciplinar.

Aunque de vez en cuando se sienten brotes verdes al respecto, y a pesar de la escasa atención que presta el colectivo político y educativo, vivimos en una sociedad en la que hay que estar continuamente justificando el relevante papel que la música juega en nuestras vidas y la importancia que supone el exponerse a una educación musical de calidad durante nuestro desarrollo.

De tal forma, este libro es un claro ejemplo de cómo y por qué científicos de múltiples disciplinas invierten su tiempo y esfuerzo en despejar interrogantes sobre cómo música y ser humano interactúan entre sí, así como la compleja historia de la relación que protagonizan desde antes de que existieran otras formas de comunicación, interés que ha dejado por el camino un gran legado de conocimiento.

Lamentablemente, este ejemplar no ha vuelto a ser reeditado y el formato físico del mismo es muy difícil de conseguir (difícil, pero no imposible, quedan muy pocos). No obstante, disponemos de él en Amazon en formato digital (Kindle) a un precio muy asequible (unos 5€) e incluso gratis para los usuarios de Kindle Unlimited.

 

Y TÚ… ¿SABES POR QUÉ NOS GUSTA LA MÚSICA?

En breve, podrás visualizar en formato vídeo la reseña sobre este ejemplar en mi CANAL DE YOUTUBE “EN CLAVE DE LETRAS”, el espacio de libros de música y/o para músicos.

Gracias por la lectura y visita. Si te ha interesado, te recomiendo que COMPARTAS, para que otros puedan acceder a su lectura, que COMENTES EN EL BLOG, si tienes algo que añadir u opinar (me interesa tu opinión) y que te HAGAS SUSCRIPTOR/A POR CORREO ELECTRÓNICO (parte superior de la columna derecha) y así no te perderás la pista ni ninguna de las actualizaciones.

Eduardo Sánchez-Escribano García de la Rosa.

 

También en me podrás encontrar en:

Facebook Fan Page: MUSIC, THINK & SHOUT – FanPage

Youtube: EN CLAVE DE LETRAS

Instagram: edu_se_music

Twitter: @EduSE_music

LinkedIn: Eduardo Sánchez-Escribano

Google+: Eduardo Sánchez-Escribano

CÓMO ESCUCHAR LA MÚSICA, POR AARON COPLAND

SOBRE EL LIBRO Y SU AUTOR

A. Copland

Desde la primera edición americana de este libro en 1939, hasta el ejemplar que cayó en mis manos hace pocos meses, innumerables personas de todo el mundo han tenido la oportunidad de aprender a escuchar y entender la música un poco mejor, y todo gracias a la fantástica y popular iniciativa del compositor americano Aaron Copland (1900-1990).

En su esencia, este ameno y no muy extenso libro deja al desnudo la personalidad del propio autor, pues se dedicó, durante toda su vida, a defender la democratización de las artes y la cultura, tanto en Estados Unidos como por todo el mundo en sus numerosos viajes, animando a artistas y, sobre todo, compositores a crear no sólo para las élites burguesas de la primera mitad del siglo pasado, sino también para el pueblo llano. Aaron Copland está considerado como un compositor que ha cosechado, prácticamente, todos los géneros, estilos y niveles de complejidad musical, llegando incluso a ganar un premio “Oscar” a la mejor banda sonora.

Cómo anécdota, me gustaría nombrar aquí su famosa y muy versionada composición para metales y percusión “Fanfare for the common man”. El nombre de dicha obra puede aparentemente no significar nada en especial, pero, en realidad, sí es así, puesto que su autor consideraba, y quería creer, que el s.XX sería el siglo de la “gente corriente”, el pueblo común.

De tal forma y en esa misma línea, la principal misión de Copland con este libro es contribuir a que cualquier persona que se lo proponga sea capaz de entender y disfrutar de aquella música para la que, supuestamente, es necesario tener grandes conocimientos teóricos y estilísticos. Obviamente, aunque lo explica de una forma bastante accesible y entendible para músicos (y no músicos) de todos los niveles, es necesario manejar cierta terminología teórico-musical para poder seguir su lectura con precisión, no obstante, se esfuerza por explicar y aclarar constantemente cualquier duda específica que intuya que le pueda surgir al lector, musicalmente hablando, menos instruido.

¿A QUIÉN VA DESTINADO ESTE LIBRO?

En líneas generales, este libro es muy apropiado para cualquier tipo y nivel de músico lector; profesionales y/o docentes, estudiantes o melómanos. Independientemente de lo instruido y experimentado que estés en el mundo de la “música académica”, le podrás sacar un gran  provecho. Dependiendo de en qué colectivo musical te encuentres, te recomiendo una perspectiva y  predisposición ante tu lectura:

MÚSICOS PROFESIONALES Y DOCENTES

Quizás, algunas de las partes, sobre todo las más técnicas, resulten un poco más pesadas, porque no dejan de ser contenidos que, en teoría, ya tendríamos que saber y tener interiorizados. La magia de esta lectura está en la propia forma de hacer llegar ciertos tecnicismos al lector por parte de Copland que, en líneas generales, resulta bastante fresco, didáctico y elocuente en sus explicaciones y reflexiones.

En numerosas ocasiones, nos vemos faltos de recursos a la hora de explicar elementos fundamentales para entender la música como pueden ser la ambigüedad del timbre, el poder de la armonía, la fenomenología de la melodía, la textura musical, el propio ritmo o el abstracto concepto y variedad de “formas musicales”. De tal forma, con este libro podemos hacer nuestros una gran variedad de recursos didácticos para ayudar a otras personas (nuestros propios alumnos en caso de los que damos clase) a entender y disfrutar la música, nuestra pasión y profesión, a otro nivel.

 

ESTUDIANTES DE MÚSICA

A lo largo de la ardua tarea que significa el estudio (más o menos) serio de la música, llega un momento (o debería llegar) en el que empezamos a interesarnos por cosas más allá de tocar muy bien nuestro instrumento. Dependiendo del nivel de madurez artística y musical del estudiante, así como de qué nivel de estimulación se propicie por parte de sus profesores y entorno de aprendizaje, ese momento puede llegar antes o después.

En tal caso, si sientes que ha llegado ese momento, puede ser una buena ocasión para hincarle el diente a este libro, pues te puede ayudar, y mucho, a empezar a entender la música desde otras perspectivas. Además, puede que entiendas y madures mucho mejor ciertos conceptos, algunos de ellos muy abstractos, con los ejemplos y explicaciones de Copland que con la de tus propios profesores o temarios.

 

MELÓMANOS Y AFICIONADOS

Por último, y siendo el principal colectivo al que el norteamericano dedicó la esencia de este libro, están los melómanos, es decir, aquellos profundos aficionados a la música culta, instrumental, académica… o como se quiera denominar (todos sabemos a lo que me refiero).

Cada uno de los párrafos de este libro está destinado a convertir la escucha de una simple obra o pieza musical en algo más allá; una completa experiencia tanto sensorial como racional. Éste, se propone ayudar a presentar una actitud más inteligente ante una manifestación musical para aquellos que, por una supuesta carencia de formación académica específica, no poseen las herramientas necesarias para conseguirlo.

 

 

ESTRUCTURA Y BREVE RESUMEN DE CONTENIDO

Desde mi punto de vista, el libro se puede estructurar en cinco partes, de las cuales  las tres centrales son de contenido, propiamente dicho.

En la primera, que busca una contextualización de la obra, está compuesta por una introducción, las notas del autor para la edición, un prefacio y algunos testimonios de gratitud, ayudándonos a ubicar las intenciones y pensamiento general del autor.

La segunda, aunque primera de contenido, está compuesta por los capítulos: “Preliminares”, “Cómo escuchamos” y “El proceso creador de la música”. En ellos, respectivamente, Copland ayuda al lector a plantearse un objetivo: pasar de “sólo escuchar” a “escuchar algo más”, entender y disfrutar la música desde distintos planos; sensual, expresivo y “puramente musical” (Una de las partes más interesantes del libro). Aquí, también cabe destacar, la comparación magistral que realiza entre música y teatro como fenómeno artístico. También, nos brinda la oportunidad de conocer la personalidad y perspectiva del compositor, que plantea como principal encargado de explicar y hacer entender la música frente al intérprete o al docente.

La siguiente parte de contenidos, tercera del libro y, a su vez, la más técnica, ahonda en las explicaciones y ayuda a entender el papel que desempeñan los distintos y principales elementos teórico-musicales en la escucha activa e inteligente de la música. Asimismo, en los capítulos “Los cuatro elementos de la música”, “La textura musical”, “La estructura musical” y “Las formas fundamentales”, podremos encontrar una refrescante y didáctica explicación de cómo y en qué medida cada elemento interviene en el fenómeno musical.

En la penúltima parte del libro, pero última de contenidos, Copland se esfuerza por acercarnos la música desde distintos géneros específicos, puesto que para entender una audición es imprescindible saber para qué y con qué fines ésta ha sido compuesta. Los géneros a los que presta principal atención, y teniendo en cuenta el año de origen de este libro, son: “La ópera y el drama musical”, “La música contemporánea” y “La música de películas”.

Este libro no tendría casi sentido sin acabar de interiorizar el último capítulo: “Del compositor al intérprete y de éste al oyente”. Según el norteamericano, más allá de las notas y de la teoría que las envuelve, por encima de todo, un oyente está escuchando la personalidad de un compositor; su forma de ser, de ver el mundo, de enfrentarse a los problemas, de valorar la belleza y sensibilidad. “Ningún compositor puede poner en su música valores que no posea como hombre”. El intérprete aquí actúa como intermediario, pues a éste también le resulta imposible no impregnar con un poco de su personalidad cada nota que traiga al mundo.

Para acabar, el libro cierra con unos apéndices sobre obras y notas que el autor añade y va haciendo alusión a lo largo de cada capítulo. Además, acompaña con una lista de obras mencionadas y otra de bibliografía relacionada muy valiosa.

 

VÍDEO DE EN CLAVE DE LETRAS SOBRE CÓMO ESCUCHAR LA MÚSICA, DE AARON COPLAND

 

CONCLUSIÓN Y VALORACIÓN PERSONAL

La simple y, a su vez, compleja intención que Aaron Copland intenta plasmar en su libro, es decir, contribuir a que nos guste y entendamos más y mejor la música, lo convierte en una obra magistral e imprescindible dentro de las lecturas que todo músico debe haber realizado. Además, presenta una estructura y lenguaje bastante asequible y ameno, incluyendo muchos ejemplos y todos los recursos gráficos necesarios para entender su mensaje.

Un ejemplar básico en nuestra biblioteca al que poder acudir para responder a una gran variedad de preguntas, tanto técnicas como otras más filosóficas. Un texto muy didáctico e inspirador que recomendar a nuestros alumnos y, cómo no, un libro muy acertado para dejar o regalar a ese amigo melómano que, no sabe ni cómo ni por qué, pero le encanta y se siente muy atraído por el “mundillo musical”.

Tras abordarlo durante unas semanas, otro de los grandes descubrimientos que me llevo, más allá de su propio contenido, no es otro que a su autor. Obviamente, ya conocía a Aaron Copland, icono, junto a Gershwin, del s. XX musical americano. Además, he tenido la oportunidad de interpretar la fanfarria antes nombrada en diversas ocasiones y soy muy fan de su “Primavera Apalache”, pero desconocía su faceta divulgativa y de compromiso con la democratización de la música y de su disfrute.

Sea como fuere, os recomiendo comprar, regalar o, si tenéis la oportunidad pedir prestado este libro. No os arrepentiréis. Si me conocéis en persona, os lo puedo dejar encantado.

 

Gracias por la lectura y visita. Si te ha interesado, te recomiendo que COMPARTAS, para que otros puedan acceder a su lectura, que COMENTES EN EL BLOG, si tienes algo que añadir u opinar (me interesa tu opinión) y que te HAGAS SUSCRIPTOR/A POR CORREO ELECTRÓNICO (parte superior de la columna derecha) y así no te perderás la pista ni ninguna de las actualizaciones.

Eduardo Sánchez-Escribano García de la Rosa.

 

También en me podrás encontrar en:

Facebook Fan Page: MUSIC, THINK & SHOUT – FanPage

Instagram: edu_se_music

Twitter: @EduSE_music

LinkedIn: Eduardo Sánchez-Escribano

Google+: Eduardo Sánchez-Escribano